"…solo la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NSA) recoge cada día información de unos 200 millones de mensajes de texto enviados entre dispositivos móviles, que usaría para acceder a datos como la ubicación del usuario, las redes de contacto y hasta los detalles de la tarjeta de crédito, de acuerdo con documentos de alto secreto filtrados por el excontratista estadounidense Edward Snowden al diario británico The Guardian (aquí) se llevó el Pulitzer por el reportaje '"
Y estas palabras de Robert Stone:
Es literalmente cierto que el mundo es visto por las superpotencias como un mapa cuadriculado con objetivos específicos. Todos estamos en los mapas militares. Puede darse la circunstancia de que no se esté desarrollando ninguna acción en esas zonas en el momento presente, pero están ahí. Y luego están las guerras que luchamos contra nosotros mismos en nuestras propias ciudades. La verdad es así de simple: allá donde estés, hay un ejército armado a escasa distancia.
Algunas de las mensajerías instantáneas consideradas seguras:
CHADDER: Mensajería instantánea antiespionaje.
El
Estadounidense John McAfee, fundador de la compañía de seguridad y del
software antivirus bautizado con su propio apellido ha creado «una plataforma de mensajería sin precedentes». Y
es que el mayor objetivo de Chadder es la de «mantener las
comunicaciones privadas», de forma que terceras personas u
organizaciones no puedan acceder a ellas.
"John McAfee ha
sido noticia durante los últimos años por tener una vida de auténtica
película de acción. El fundador de McAfee ha sido acusado de asesinato,
ha estado en busca y captura y ha visto como su vida se adaptaba en un
guión cinematográfico. Después de todas esas aventuras, McAfee ha
decidido volver al mundo de la seguridad y la informática y su objetivo
ha sido diseñar equipos y sistemas antiespionaje. (+ en la reviste wired)
En concreto, McAfee ha estado buscando sistemas con los que evitar que
la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA, por sus siglas en
inglés) espíe a los usuarios. Así, en un principio McAfee planeó un
dispositivo móvil antiespionaje y ahora ha creado una aplicación de
mensajería instantánea que tiene el mismo objetivo.
La app en cuestión ha sido bautizada como Chadder. Según el propio
McAfee, se trata de "una plataforma de mensajería sin precedentes". El
objetivo de Chadder es "mantener las comunicaciones privadas", de forma
que terceras personas u organizaciones no puedan acceder a ellas."
WhatsApp:
Las comunicaciones instantáneas, a pesar de haber mejorado bastante, siguen siendo un punto débil, Whatsapp es la más utilizada (500 millones de usuarios), pero la seguridad en sus comunicaciones es débil, ya que la clave para cifrar los mensajes se envía cuando iniciamos sesión, y esta se transmite con poca seguridad. Es como si guardáramos nuestros objetos de valor en una caja fuerte y dejáramos pegado en la puerta un post-it con la combinación para abrirla.
Aunque el mayor problema relacionado con la seguridad en WhatsApp es la facilidad con la que se puede suplantar la identidad de otra persona, debido al sistema que utiliza la aplicación para identificarnos.
Por ejemplo, un reciente estudio sobre la aplicación ha demostrado que se puede hackear el archivo encriptado en el dispositivo que contiene el historial de los mensajes, y todo en pocos segundos y con un script sencillo.
Más información sobre cómo configurar la privacidad en whatsapp en este estupendo artículo de la Vanguardia.
Telegram:
Dispone
de un cifrado que la propia compañía califica de “indescifrable” lo que
hace muy difícil que terceras personas puedan leer nuestros mensajes
aunque los intercepten.
"Muchos
recordaréis que los creadores de la aplicación propusieron una
recompensa de 200 mil dólares para quien consiguiera hackear el
protocolo de seguridad MTProto de Telegram. Para algunos, este “desafío”
representaba un válido argumento a favor de la fiabilidad del producto.
No obstante, hay que decir que este concurso, en el cual había que
descifrar un mensaje transferido de un remitente a un destinatario,
ponía en evidencia el hecho de que hackear el sistema no constituye la
manera más eficaz para poner a prueba de manera completa la aplicación
entera. Un periodista de la página web cryptofails.com ha
notado que el algoritmo MTProto es altamente inseguro y no fiable, ya
“que ignora todos los estudios de criptografía más importantes
publicados durante los últimos 20 años”; el periodista ha sugerido a los
desarrolladores de Telegram que contactaran con verdaderos expertos de
criptografía.
Otro
detalle curioso: aunque en la base de Telegram haya un protocolo de
seguridad bastante complejo, la aplicación es vulnerable a los ataques
directos. No estamos hablando de acciones complicadas sino de algo más
básico. El usuario, cuando se registra, recibe un SMS y tiene que
introducir el código de seguridad recibido para activar la aplicación.
Pero si un hacker se apropia del mensaje que ha recibido el usuario,
puede activar su copia de la aplicación con el código de otra persona y,
en consecuencia, recibirá todos los mensajes enviados a la víctima."
También ofrece la posibilidad de enviar mensajes que se auto eliminan tras un tiempo programado y utilizar un sistema todavía más seguro denominado chat secreto.
Los
chats secretos usan cifrado de móvil a móvil de modo que nadie excepto
los interlocutores puede leer las conversaciones. Además, permiten la
autodestrucción de los mensajes y evitan que éstos puedan ser
reenviados. Para asegurarse de que Telegram no tiene acceso a la
conversación, ambas personas tienen que comprobar que comparten la misma clave. Para ello se pueden utilizar las “claves visuales”, aunque esto reduce la usabilidad de la aplicación.
Y otra importante mensajería instantánea anti espías:
HERMES:
Un cifrado indescifrable: Su funcionamiento es sencillo, pero a la vez muy potente, y nos hace pensar que de verdad estamos ante algo muy fuerte y sin fisuras. Cuando un usuario envíe algún mensaje, este se cifrará en una fotografía utilizando un sistema de doble cifrado con esteganografía. De esta forma, la única forma de leer el contenido que está cifrado en la imagen será utilizando la clave que tiene el receptor del mensaje. A todo esto hay que añadir que Hermes no usa en ningún momento los datos personales que se almacenan en el teléfono. Una medida de seguridad adicional.
La instalación de Hermes no se puede realizar ni desde Google Play ni desde App Store. Para poder tenerlo necesitaremos enviar el teléfono a la propia empresa, dónde sus trabajadores instalarán el programa de forma manual. Hasta ahí llega su seguridad.
Los menos seguros, aunque lo parezcan:
En cierto sentido, se trata de una aplicación única: todos los mensajes de Confide vienen en
unos
rectángulos sin texto, el cual es visible solo cuando se hace clic en
los rectángulos. Además, la aplicación no permite almacenar los mensajes
por mucho tiempo así que nadie podrá descubrir vuestra correspondencia.
Si se intenta sacar un pantallazo del mensaje, el programa reenvía al
usuario a la lista de contactos y el interlocutor recibirá la respectiva
notificación. Estas funcionalidades muy evidenciadas por los
desarrolladores hacen que se pueda leer un mensaje pero no se puede
guardar. Pero hay otra cosa: si el usuario quiere guardar el mensaje, en
lugar de hacer un pantallazo puede utilizar una cámara para registrar
la comunicación palabra por palabra. Por esto, se trata de un programa
que ejecuta el “teatro de la seguridad”, o sea a través de las varias
funcionalidades se crea una ilusión de seguridad. Puede venir bien para
los que quieren jugar a los agentes secretos.
WICKR:Declara ser una solución que no deja rastro de los mensajes en el dispositivo: borra (en
algunos caso de manera irrevocable) el historial de mensajes de la
memoria del dispositivo y del servidor, protege los mensajes con
algoritmos de seguridad de alto nivel, proporciona herramientas para
decidir cuánto tiempo se quedará el mensaje en el dispositivo del
destinatario y deshabilita la posibilidad de copiar los mensajes. Tal
como la aplicación anterior, hay algunas limitaciones técnicas debidas a
las funcionalidades de los smartphones: todo este sistema funciona
poco frente a las cámaras integradas de cualquier dispositivo móvil. (+)
Y LOS MÁS SEGUROS:
Uno de los pocos proyectos desarrollados por unos famosos gurús de la
criptografía. La ventaja es que se pueden borrar enteramente los
mensajes sin dejar ningún rastro: ni el remitente ni el destinatario
pueden recuperar los mensajes desde sus dispositivos. Esta funcionalidad
se activa automáticamente o manualmente: después de que haya pasado
algún tiempo, los mensajes se borran automáticamente de la cuenta. Pero
el mérito principal es que se aplica un óptimo sistema de encriptación,
así que es prácticamente inútil para los cibercriminales intentar
acceder a los mensajes. De todas formas, la app cifra no solo mensajes
sino también vídeos y notas audios. Por el resto, en este servicio hay
un montón de defectos, empezando par un procedimiento de registro
bastante ambiguo y terminando por el precio: la suscripción anual a
Silent Circle cuesta 100 dólares (más o menos 73 euros).
Textsecure (Ha sido recomendado por Edward Snowden)
Información más extendida en el blog de Kaspersky
—Hace sólo unos días la mayoría de los usuarios nos enterábamos de la existencia de Heartbleed, una gravísima vulnerabilidad en una librería SSL (sistema
de seguridad utilizado por algunas de las principales webs que existen.
Usado por Google, amazón, yahoo y facebook entre otros) que ha puesto
en jaque a los grandes de Internet y que aún no ha podido ser
exterminada. Algunos bancos se han visto afectados, así que aunque
cambien ahora tu contraseña vigila los movimientos inusuales en tu
cuenta.
Los expertos señalan además que algunos ciberdelincuentes podrían aprovechar el fallo de seguridad para crear webs falsas que
imitando a las originales engañen a los usuarios para acceder a sus
datos privados. Así que ya sabéis, andaos con una atención extra en las
próximas semanas.
—Google permite averiguar si una página web es segura, Por ejemplo, para saber si mi página es peligrosa: www.pilarmandl.com se contruye está URL:
http://www.google.com/safebrowsing/diagnostic?site=pilarmandl.com
Para consultar la web que desee comprobar, sustituye las palabras “pilarmandl.com” tras “site= pon el nombre de dominio de la web que quieras consultar, quitando las www.
5 consejos básicos para una contraseña segura:
1- Como mínimo, debería tener 8 caracteres. Cuanto más larga más segura.
2- Deberíamos evitar las repeticiones de caracteres o patrones o secuencias obvias; es decir, cosas como "no más de dos números seguidos, "1234" o "qazwsx".
3- Deberíamos combinar mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales (*,+,ç,?,¿,!,- o ?)
Una
vez me enviaron unas cuántas fotos de Xavi para hacerle un trabajo y no
podéis ni imaginar lo que habían complicado la contraseña para acceder a
ellas)
4- Cambiar vocales por números. La 'o' por el '0' o la 'e' por el '3' puede mejorar, sensiblemente, una contraseña.
5- Cambia la contraseña como mínimo cada seis meses.
3 páginas que te interesan para borrar huellas en
facebook o fotos que otros te hayan etiquetado:
" El 14% de los adultos encuestados ha sufrido consecuencias negativas debido a actividades online, incluido el despido del trabajo (21%) o la pérdida del seguro médico (16%) y el 14% de los chicos norteamericanos no pudieron asistir a la universidad que deseaban debido a su imagen online". ¿Sabías que haciendo click en un link estás dando acceso a un tercero a nuestra información general? ¿Y que Las aplicaciones tienen acceso a los datos que insertamos dentro de la plataforma, y realmente no tenemos forma de saber de qué manera están usando esos datos? ¿Y que facebook también te permite el acceso a través de conexiones cifradas? aunque va algo más lento...
1- lastnightapp.com (Last Night Never Happened) "La última noche nunca pasó" Es una aplicación que permite borrar fotos y mensajes publicados en facebook y en Twitter que se se quieran eliminar totalmente y salvarte de alguna situación comprometedora.
2- en profilewatch te informan sobre lo que hablan de ti.
3- reppler.com aporta herramientas para controlar la imagen.
El espionaje de las
comunicaciones móviles no es algo reservado a la NSA. Si bien es poco
probable que la agencia de información americana esté interesada en
conocer dónde estás o a quién llamas, lo cierto es que a día de hoy ya
es posible realizar un espionaje personalizado a través del móvil. Para
ello existen determinadas aplicaciones que permiten seguir y registrar
la pista digital del usuario de forma relativamente sencilla y efectiva.
Pero cuidado, según las circunstancias, es probable que sea algo ilegal
y puede ser considerado delito.
En primer lugar conviene dejar claro los diferentes grados de
‘espionaje’ que se pueden realizar mediante el móvil. La fórmula más
sencilla es utilizar apps destinadas a la vigilancia de niños o mayores,
o la localización del móvil en caso de extravío. Estas herramientas
como "find my phone" o "geofencer" son muy simples y son visibles por el
usuario, por lo que aportan poca información (sólo la posición
geográfica) y pueden ser desactivadas desde el propio móvil.
Algunas aplicaciones requieren un acceso directo al dispositivo Una
opción más avanzada son las apps de espionaje propiamente dicho como
"mSpy" o "mobilespy". Este tipo de aplicaciones requieren un acceso
directo al dispositivo y una manipulación más o menos avanzada de la
configuración. Estas aplicaciones permiten rastrear prácticamente todo
lo que está en el móvil, desde las fotos, las webs visitadas o las
llamadas, hasta los chats e incluso grabar conversaciones o tomar fotos
de forma remota. Los más avanzados permiten hasta tomar el control del
móvil y bloquear determinadas llamadas, pero eso podría delatar el
pinchazo.
Este tipo de herramientas se instalan de forma invisible en el móvil a
vigilar y son monitorizadas mediante un panel de control externo. Suelen
ir asociadas a un modelo de suscripción que puede rondar los 50 dólares
al mes. Pero hay que tener en cuenta que en el contrato de uso queda
bien claro que se deben respetar las leyes, y eso significa que solo en
casos de teléfonos de empresa o de hijos menores o tutelados, este tipo
de vigilancia puede considerarse legal. De hecho, el pasado mes de mayo
fue detenido en Burgos un hombre de 23 años por espiar a su novia
mediante una aplicación del móvil.
Además el uso de apps espías es un arma de doble filo. Amparados en que
su uso bordea la legalidad, existen apps que son un timo y prometen
prestaciones que después nunca funcionan, o lo que es peor, infectan con
malware los terminales. No resulta fácil distinguirlas de las
auténticas, pero un pequeño análisis de sus prestaciones, su precio y la
opinión en los foros de Internet pueden ser de gran utilidad.
Pero no solo hay aplicaciones, en las tiendas de apps, que infectan con
malware y software de espionaje nuestros dispositivos. También hay
fabricantes de móviles que incluyen firmware infectado con programas
espía que llegan directamente al usuario. La empresa alemana de
seguridad G Data así lo desvela. El modelo N9500 del fabricante chino
Star incrustaba este spyware que enviaba datos de los usuarios a los
servidores en China y permitía la instalación de nuevas aplicaciones
maliciosas. Los asequibles precios de los dispositivos que vienen de
China hacen que sean muy atractivos para los usuarios, pero hay que
estar siempre alerta de lo que estamos comprando.
¿Cómo saber si me están espiando?
Descubrir si nuestro móvil está ‘pinchado’ depende en gran medida de la
habilidad o torpeza de quien quiera espiarnos. En los casos más
avanzados puede ser absolutamente indetectable para un usuario común.
Sin embargo eso cuesta dinero y tiempo, dos cosas poco habituales salvo
en profesionales del tema.
Si tu móvil está siendo espiado, la batería puede gastarse antes Lo más
probable es que se usen apps comerciales que pueden ser detectadas si
observamos algunos puntos. Por ejemplo un mayor consumo de datos que
puede provenir de la transmisión de información a sistema de vigilancia.
También puede notarse una menor autonomía del móvil debido a un mayor
consumo de energía de la app espía que está constantemente activa.
En cualquier caso, si se sospecha un posible pinchazo en el móvil
existen apps como "Cathr" que por apenas dos dólares realiza un rastreo
del sistema en busca de apps espías.
Medidas de precaución
Evitar ser espiado a través del móvil es algo tan sencillo o tan
complicado como tomar unas medidas básicas de protección que sirven
igualmente para reforzar nuestra seguridad en Internet. Eso sí, hay que
dejar claro que no existe nada que evite al 100% la posibilidad de ser
espiado -ya quisiera Angela Merkel-. Todo es una cuestión de saber quién
pone más interés en su trabajo, el espía o el espiado.
Cosas tan sencillas como usar una contraseña medianamente compleja o no
permitir el acceso al móvil a nadie sin estar presente, ya dificultan
bastante el espionaje. Desactivar el módulo de geoposicionamiento en el
móvil o no permitir el uso de apps inseguras también puede ayudar. Por
último, no usar redes WiFi públicas poco seguras, o al menos no hacerlo
siempre en las mismas o de forma habitual, también evita la captura de
información sensible.
Si la paranoia nos ha invadido, conviene saber que las apps espías se
llevan mal con el servicio de mensajería de los smartphones Blackberry o
que son incapaces de rastrear SMS si son borrados inmediatamente
después de ser recibidos. Y si de verdad hay algo que ocultar, un
segundo móvil desechable es siempre una buena opción.
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263
El espionaje de las
comunicaciones móviles no es algo reservado a la NSA. Si bien es poco
probable que la agencia de información americana esté interesada en
conocer dónde estás o a quién llamas, lo cierto es que a día de hoy ya
es posible realizar un espionaje personalizado a través del móvil. Para
ello existen determinadas aplicaciones que permiten seguir y registrar
la pista digital del usuario de forma relativamente sencilla y efectiva.
Pero cuidado, según las circunstancias, es probable que sea algo ilegal
y puede ser considerado delito.
En primer lugar conviene dejar claro los diferentes grados de
‘espionaje’ que se pueden realizar mediante el móvil. La fórmula más
sencilla es utilizar apps destinadas a la vigilancia de niños o mayores,
o la localización del móvil en caso de extravío. Estas herramientas
como "find my phone" o "geofencer" son muy simples y son visibles por el
usuario, por lo que aportan poca información (sólo la posición
geográfica) y pueden ser desactivadas desde el propio móvil.
Algunas aplicaciones requieren un acceso directo al dispositivo Una
opción más avanzada son las apps de espionaje propiamente dicho como
"mSpy" o "mobilespy". Este tipo de aplicaciones requieren un acceso
directo al dispositivo y una manipulación más o menos avanzada de la
configuración. Estas aplicaciones permiten rastrear prácticamente todo
lo que está en el móvil, desde las fotos, las webs visitadas o las
llamadas, hasta los chats e incluso grabar conversaciones o tomar fotos
de forma remota. Los más avanzados permiten hasta tomar el control del
móvil y bloquear determinadas llamadas, pero eso podría delatar el
pinchazo.
Este tipo de herramientas se instalan de forma invisible en el móvil a
vigilar y son monitorizadas mediante un panel de control externo. Suelen
ir asociadas a un modelo de suscripción que puede rondar los 50 dólares
al mes. Pero hay que tener en cuenta que en el contrato de uso queda
bien claro que se deben respetar las leyes, y eso significa que solo en
casos de teléfonos de empresa o de hijos menores o tutelados, este tipo
de vigilancia puede considerarse legal. De hecho, el pasado mes de mayo
fue detenido en Burgos un hombre de 23 años por espiar a su novia
mediante una aplicación del móvil.
Además el uso de apps espías es un arma de doble filo. Amparados en que
su uso bordea la legalidad, existen apps que son un timo y prometen
prestaciones que después nunca funcionan, o lo que es peor, infectan con
malware los terminales. No resulta fácil distinguirlas de las
auténticas, pero un pequeño análisis de sus prestaciones, su precio y la
opinión en los foros de Internet pueden ser de gran utilidad.
Pero no solo hay aplicaciones, en las tiendas de apps, que infectan con
malware y software de espionaje nuestros dispositivos. También hay
fabricantes de móviles que incluyen firmware infectado con programas
espía que llegan directamente al usuario. La empresa alemana de
seguridad G Data así lo desvela. El modelo N9500 del fabricante chino
Star incrustaba este spyware que enviaba datos de los usuarios a los
servidores en China y permitía la instalación de nuevas aplicaciones
maliciosas. Los asequibles precios de los dispositivos que vienen de
China hacen que sean muy atractivos para los usuarios, pero hay que
estar siempre alerta de lo que estamos comprando.
¿Cómo saber si me están espiando?
Descubrir si nuestro móvil está ‘pinchado’ depende en gran medida de la
habilidad o torpeza de quien quiera espiarnos. En los casos más
avanzados puede ser absolutamente indetectable para un usuario común.
Sin embargo eso cuesta dinero y tiempo, dos cosas poco habituales salvo
en profesionales del tema.
Si tu móvil está siendo espiado, la batería puede gastarse antes Lo más
probable es que se usen apps comerciales que pueden ser detectadas si
observamos algunos puntos. Por ejemplo un mayor consumo de datos que
puede provenir de la transmisión de información a sistema de vigilancia.
También puede notarse una menor autonomía del móvil debido a un mayor
consumo de energía de la app espía que está constantemente activa.
En cualquier caso, si se sospecha un posible pinchazo en el móvil
existen apps como "Cathr" que por apenas dos dólares realiza un rastreo
del sistema en busca de apps espías.
Medidas de precaución
Evitar ser espiado a través del móvil es algo tan sencillo o tan
complicado como tomar unas medidas básicas de protección que sirven
igualmente para reforzar nuestra seguridad en Internet. Eso sí, hay que
dejar claro que no existe nada que evite al 100% la posibilidad de ser
espiado -ya quisiera Angela Merkel-. Todo es una cuestión de saber quién
pone más interés en su trabajo, el espía o el espiado.
Cosas tan sencillas como usar una contraseña medianamente compleja o no
permitir el acceso al móvil a nadie sin estar presente, ya dificultan
bastante el espionaje. Desactivar el módulo de geoposicionamiento en el
móvil o no permitir el uso de apps inseguras también puede ayudar. Por
último, no usar redes WiFi públicas poco seguras, o al menos no hacerlo
siempre en las mismas o de forma habitual, también evita la captura de
información sensible.
Si la paranoia nos ha invadido, conviene saber que las apps espías se
llevan mal con el servicio de mensajería de los smartphones Blackberry o
que son incapaces de rastrear SMS si son borrados inmediatamente
después de ser recibidos. Y si de verdad hay algo que ocultar, un
segundo móvil desechable es siempre una buena opción.Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263
El espionaje de las
comunicaciones móviles no es algo reservado a la NSA. Si bien es poco
probable que la agencia de información americana esté interesada en
conocer dónde estás o a quién llamas, lo cierto es que a día de hoy ya
es posible realizar un espionaje personalizado a través del móvil. Para
ello existen determinadas aplicaciones que permiten seguir y registrar
la pista digital del usuario de forma relativamente sencilla y efectiva.
Pero cuidado, según las circunstancias, es probable que sea algo ilegal
y puede ser considerado delito.
En primer lugar conviene dejar claro los diferentes grados de
‘espionaje’ que se pueden realizar mediante el móvil. La fórmula más
sencilla es utilizar apps destinadas a la vigilancia de niños o mayores,
o la localización del móvil en caso de extravío. Estas herramientas
como "find my phone" o "geofencer" son muy simples y son visibles por el
usuario, por lo que aportan poca información (sólo la posición
geográfica) y pueden ser desactivadas desde el propio móvil.
Algunas aplicaciones requieren un acceso directo al dispositivo Una
opción más avanzada son las apps de espionaje propiamente dicho como
"mSpy" o "mobilespy". Este tipo de aplicaciones requieren un acceso
directo al dispositivo y una manipulación más o menos avanzada de la
configuración. Estas aplicaciones permiten rastrear prácticamente todo
lo que está en el móvil, desde las fotos, las webs visitadas o las
llamadas, hasta los chats e incluso grabar conversaciones o tomar fotos
de forma remota. Los más avanzados permiten hasta tomar el control del
móvil y bloquear determinadas llamadas, pero eso podría delatar el
pinchazo.
Este tipo de herramientas se instalan de forma invisible en el móvil a
vigilar y son monitorizadas mediante un panel de control externo. Suelen
ir asociadas a un modelo de suscripción que puede rondar los 50 dólares
al mes. Pero hay que tener en cuenta que en el contrato de uso queda
bien claro que se deben respetar las leyes, y eso significa que solo en
casos de teléfonos de empresa o de hijos menores o tutelados, este tipo
de vigilancia puede considerarse legal. De hecho, el pasado mes de mayo
fue detenido en Burgos un hombre de 23 años por espiar a su novia
mediante una aplicación del móvil.
Además el uso de apps espías es un arma de doble filo. Amparados en que
su uso bordea la legalidad, existen apps que son un timo y prometen
prestaciones que después nunca funcionan, o lo que es peor, infectan con
malware los terminales. No resulta fácil distinguirlas de las
auténticas, pero un pequeño análisis de sus prestaciones, su precio y la
opinión en los foros de Internet pueden ser de gran utilidad.
Pero no solo hay aplicaciones, en las tiendas de apps, que infectan con
malware y software de espionaje nuestros dispositivos. También hay
fabricantes de móviles que incluyen firmware infectado con programas
espía que llegan directamente al usuario. La empresa alemana de
seguridad G Data así lo desvela. El modelo N9500 del fabricante chino
Star incrustaba este spyware que enviaba datos de los usuarios a los
servidores en China y permitía la instalación de nuevas aplicaciones
maliciosas. Los asequibles precios de los dispositivos que vienen de
China hacen que sean muy atractivos para los usuarios, pero hay que
estar siempre alerta de lo que estamos comprando.
¿Cómo saber si me están espiando?
Descubrir si nuestro móvil está ‘pinchado’ depende en gran medida de la
habilidad o torpeza de quien quiera espiarnos. En los casos más
avanzados puede ser absolutamente indetectable para un usuario común.
Sin embargo eso cuesta dinero y tiempo, dos cosas poco habituales salvo
en profesionales del tema.
Si tu móvil está siendo espiado, la batería puede gastarse antes Lo más
probable es que se usen apps comerciales que pueden ser detectadas si
observamos algunos puntos. Por ejemplo un mayor consumo de datos que
puede provenir de la transmisión de información a sistema de vigilancia.
También puede notarse una menor autonomía del móvil debido a un mayor
consumo de energía de la app espía que está constantemente activa.
En cualquier caso, si se sospecha un posible pinchazo en el móvil
existen apps como "Cathr" que por apenas dos dólares realiza un rastreo
del sistema en busca de apps espías.
Medidas de precaución
Evitar ser espiado a través del móvil es algo tan sencillo o tan
complicado como tomar unas medidas básicas de protección que sirven
igualmente para reforzar nuestra seguridad en Internet. Eso sí, hay que
dejar claro que no existe nada que evite al 100% la posibilidad de ser
espiado -ya quisiera Angela Merkel-. Todo es una cuestión de saber quién
pone más interés en su trabajo, el espía o el espiado.
Cosas tan sencillas como usar una contraseña medianamente compleja o no
permitir el acceso al móvil a nadie sin estar presente, ya dificultan
bastante el espionaje. Desactivar el módulo de geoposicionamiento en el
móvil o no permitir el uso de apps inseguras también puede ayudar. Por
último, no usar redes WiFi públicas poco seguras, o al menos no hacerlo
siempre en las mismas o de forma habitual, también evita la captura de
información sensible.
Si la paranoia nos ha invadido, conviene saber que las apps espías se
llevan mal con el servicio de mensajería de los smartphones Blackberry o
que son incapaces de rastrear SMS si son borrados inmediatamente
después de ser recibidos. Y si de verdad hay algo que ocultar, un
segundo móvil desechable es siempre una buena opción.
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263dddd
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263dddd
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263
El espionaje de las
comunicaciones móviles no es algo reservado a la NSA. Si bien es poco
probable que la agencia de información americana esté interesada en
conocer dónde estás o a quién llamas, lo cierto es que a día de hoy ya
es posible realizar un espionaje personalizado a través del móvil. Para
ello existen determinadas aplicaciones que permiten seguir y registrar
la pista digital del usuario de forma relativamente sencilla y efectiva.
Pero cuidado, según las circunstancias, es probable que sea algo ilegal
y puede ser considerado delito.
En primer lugar conviene dejar claro los diferentes grados de
‘espionaje’ que se pueden realizar mediante el móvil. La fórmula más
sencilla es utilizar apps destinadas a la vigilancia de niños o mayores,
o la localización del móvil en caso de extravío. Estas herramientas
como "find my phone" o "geofencer" son muy simples y son visibles por el
usuario, por lo que aportan poca información (sólo la posición
geográfica) y pueden ser desactivadas desde el propio móvil.
Algunas aplicaciones requieren un acceso directo al dispositivo Una
opción más avanzada son las apps de espionaje propiamente dicho como
"mSpy" o "mobilespy". Este tipo de aplicaciones requieren un acceso
directo al dispositivo y una manipulación más o menos avanzada de la
configuración. Estas aplicaciones permiten rastrear prácticamente todo
lo que está en el móvil, desde las fotos, las webs visitadas o las
llamadas, hasta los chats e incluso grabar conversaciones o tomar fotos
de forma remota. Los más avanzados permiten hasta tomar el control del
móvil y bloquear determinadas llamadas, pero eso podría delatar el
pinchazo.
Este tipo de herramientas se instalan de forma invisible en el móvil a
vigilar y son monitorizadas mediante un panel de control externo. Suelen
ir asociadas a un modelo de suscripción que puede rondar los 50 dólares
al mes. Pero hay que tener en cuenta que en el contrato de uso queda
bien claro que se deben respetar las leyes, y eso significa que solo en
casos de teléfonos de empresa o de hijos menores o tutelados, este tipo
de vigilancia puede considerarse legal. De hecho, el pasado mes de mayo
fue detenido en Burgos un hombre de 23 años por espiar a su novia
mediante una aplicación del móvil.
Además el uso de apps espías es un arma de doble filo. Amparados en que
su uso bordea la legalidad, existen apps que son un timo y prometen
prestaciones que después nunca funcionan, o lo que es peor, infectan con
malware los terminales. No resulta fácil distinguirlas de las
auténticas, pero un pequeño análisis de sus prestaciones, su precio y la
opinión en los foros de Internet pueden ser de gran utilidad.
Pero no solo hay aplicaciones, en las tiendas de apps, que infectan con
malware y software de espionaje nuestros dispositivos. También hay
fabricantes de móviles que incluyen firmware infectado con programas
espía que llegan directamente al usuario. La empresa alemana de
seguridad G Data así lo desvela. El modelo N9500 del fabricante chino
Star incrustaba este spyware que enviaba datos de los usuarios a los
servidores en China y permitía la instalación de nuevas aplicaciones
maliciosas. Los asequibles precios de los dispositivos que vienen de
China hacen que sean muy atractivos para los usuarios, pero hay que
estar siempre alerta de lo que estamos comprando.
¿Cómo saber si me están espiando?
Descubrir si nuestro móvil está ‘pinchado’ depende en gran medida de la
habilidad o torpeza de quien quiera espiarnos. En los casos más
avanzados puede ser absolutamente indetectable para un usuario común.
Sin embargo eso cuesta dinero y tiempo, dos cosas poco habituales salvo
en profesionales del tema.
Si tu móvil está siendo espiado, la batería puede gastarse antes Lo más
probable es que se usen apps comerciales que pueden ser detectadas si
observamos algunos puntos. Por ejemplo un mayor consumo de datos que
puede provenir de la transmisión de información a sistema de vigilancia.
También puede notarse una menor autonomía del móvil debido a un mayor
consumo de energía de la app espía que está constantemente activa.
En cualquier caso, si se sospecha un posible pinchazo en el móvil
existen apps como "Cathr" que por apenas dos dólares realiza un rastreo
del sistema en busca de apps espías.
Medidas de precaución
Evitar ser espiado a través del móvil es algo tan sencillo o tan
complicado como tomar unas medidas básicas de protección que sirven
igualmente para reforzar nuestra seguridad en Internet. Eso sí, hay que
dejar claro que no existe nada que evite al 100% la posibilidad de ser
espiado -ya quisiera Angela Merkel-. Todo es una cuestión de saber quién
pone más interés en su trabajo, el espía o el espiado.
Cosas tan sencillas como usar una contraseña medianamente compleja o no
permitir el acceso al móvil a nadie sin estar presente, ya dificultan
bastante el espionaje. Desactivar el módulo de geoposicionamiento en el
móvil o no permitir el uso de apps inseguras también puede ayudar. Por
último, no usar redes WiFi públicas poco seguras, o al menos no hacerlo
siempre en las mismas o de forma habitual, también evita la captura de
información sensible.
Si la paranoia nos ha invadido, conviene saber que las apps espías se
llevan mal con el servicio de mensajería de los smartphones Blackberry o
que son incapaces de rastrear SMS si son borrados inmediatamente
después de ser recibidos. Y si de verdad hay algo que ocultar, un
segundo móvil desechable es siempre una buena opción.
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263
El espionaje de las
comunicaciones móviles no es algo reservado a la NSA. Si bien es poco
probable que la agencia de información americana esté interesada en
conocer dónde estás o a quién llamas, lo cierto es que a día de hoy ya
es posible realizar un espionaje personalizado a través del móvil. Para
ello existen determinadas aplicaciones que permiten seguir y registrar
la pista digital del usuario de forma relativamente sencilla y efectiva.
Pero cuidado, según las circunstancias, es probable que sea algo ilegal
y puede ser considerado delito.
En primer lugar conviene dejar claro los diferentes grados de
‘espionaje’ que se pueden realizar mediante el móvil. La fórmula más
sencilla es utilizar apps destinadas a la vigilancia de niños o mayores,
o la localización del móvil en caso de extravío. Estas herramientas
como "find my phone" o "geofencer" son muy simples y son visibles por el
usuario, por lo que aportan poca información (sólo la posición
geográfica) y pueden ser desactivadas desde el propio móvil.
Algunas aplicaciones requieren un acceso directo al dispositivo Una
opción más avanzada son las apps de espionaje propiamente dicho como
"mSpy" o "mobilespy". Este tipo de aplicaciones requieren un acceso
directo al dispositivo y una manipulación más o menos avanzada de la
configuración. Estas aplicaciones permiten rastrear prácticamente todo
lo que está en el móvil, desde las fotos, las webs visitadas o las
llamadas, hasta los chats e incluso grabar conversaciones o tomar fotos
de forma remota. Los más avanzados permiten hasta tomar el control del
móvil y bloquear determinadas llamadas, pero eso podría delatar el
pinchazo.
Este tipo de herramientas se instalan de forma invisible en el móvil a
vigilar y son monitorizadas mediante un panel de control externo. Suelen
ir asociadas a un modelo de suscripción que puede rondar los 50 dólares
al mes. Pero hay que tener en cuenta que en el contrato de uso queda
bien claro que se deben respetar las leyes, y eso significa que solo en
casos de teléfonos de empresa o de hijos menores o tutelados, este tipo
de vigilancia puede considerarse legal. De hecho, el pasado mes de mayo
fue detenido en Burgos un hombre de 23 años por espiar a su novia
mediante una aplicación del móvil.
Además el uso de apps espías es un arma de doble filo. Amparados en que
su uso bordea la legalidad, existen apps que son un timo y prometen
prestaciones que después nunca funcionan, o lo que es peor, infectan con
malware los terminales. No resulta fácil distinguirlas de las
auténticas, pero un pequeño análisis de sus prestaciones, su precio y la
opinión en los foros de Internet pueden ser de gran utilidad.
Pero no solo hay aplicaciones, en las tiendas de apps, que infectan con
malware y software de espionaje nuestros dispositivos. También hay
fabricantes de móviles que incluyen firmware infectado con programas
espía que llegan directamente al usuario. La empresa alemana de
seguridad G Data así lo desvela. El modelo N9500 del fabricante chino
Star incrustaba este spyware que enviaba datos de los usuarios a los
servidores en China y permitía la instalación de nuevas aplicaciones
maliciosas. Los asequibles precios de los dispositivos que vienen de
China hacen que sean muy atractivos para los usuarios, pero hay que
estar siempre alerta de lo que estamos comprando.
¿Cómo saber si me están espiando?
Descubrir si nuestro móvil está ‘pinchado’ depende en gran medida de la
habilidad o torpeza de quien quiera espiarnos. En los casos más
avanzados puede ser absolutamente indetectable para un usuario común.
Sin embargo eso cuesta dinero y tiempo, dos cosas poco habituales salvo
en profesionales del tema.
Si tu móvil está siendo espiado, la batería puede gastarse antes Lo más
probable es que se usen apps comerciales que pueden ser detectadas si
observamos algunos puntos. Por ejemplo un mayor consumo de datos que
puede provenir de la transmisión de información a sistema de vigilancia.
También puede notarse una menor autonomía del móvil debido a un mayor
consumo de energía de la app espía que está constantemente activa.
En cualquier caso, si se sospecha un posible pinchazo en el móvil
existen apps como "Cathr" que por apenas dos dólares realiza un rastreo
del sistema en busca de apps espías.
Medidas de precaución
Evitar ser espiado a través del móvil es algo tan sencillo o tan
complicado como tomar unas medidas básicas de protección que sirven
igualmente para reforzar nuestra seguridad en Internet. Eso sí, hay que
dejar claro que no existe nada que evite al 100% la posibilidad de ser
espiado -ya quisiera Angela Merkel-. Todo es una cuestión de saber quién
pone más interés en su trabajo, el espía o el espiado.
Cosas tan sencillas como usar una contraseña medianamente compleja o no
permitir el acceso al móvil a nadie sin estar presente, ya dificultan
bastante el espionaje. Desactivar el módulo de geoposicionamiento en el
móvil o no permitir el uso de apps inseguras también puede ayudar. Por
último, no usar redes WiFi públicas poco seguras, o al menos no hacerlo
siempre en las mismas o de forma habitual, también evita la captura de
información sensible.
Si la paranoia nos ha invadido, conviene saber que las apps espías se
llevan mal con el servicio de mensajería de los smartphones Blackberry o
que son incapaces de rastrear SMS si son borrados inmediatamente
después de ser recibidos. Y si de verdad hay algo que ocultar, un
segundo móvil desechable es siempre una buena opción.
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263
Ver más en: http://www.20minutos.es/noticia/2170503/0/aplicaciones/espia/movil/#xtor=AD-15&xts=467263
No hay comentarios:
Publicar un comentario